Se pone en marcha una nueva edición de Voluntarios de la Fundación Elecnor
El próximo mes de septiembre se desarrollará la edición 2015 del Voluntariado de la Fundación Elecnor que tendrá nuevamente como escenario la comunidad de Totoral, en el desierto chileno de Atacama, donde la Fundación puso en marcha hace casi 2 años el proyecto de energía y agua Sinergia.
Los tres Voluntarios que el 31 de agosto viajarán a Chile se preparan estos días para tenerlo todo a punto. A la hora de organizar las maletas, hay que tener muy en cuenta las condiciones climatológicas que se encontrarán allí en esa época. Para ese tipo de detalles y otros muchos, resulta especialmente valioso el testimonio de los 3 Voluntarios de 2014, que están haciendo las veces de asesores de María Carreira, Rubén López y Ana Jurado, los elegidos para esta segunda peripecia por tierras chilenas.
Entre los preparativos, esta semana se ha celebrado una jornada informativa en la que estuvieron presentes los Voluntarios, así como los dos tutores que estarán con ellos en todo momento en Totoral aportando toda su experiencia técnica: Agustín Suárez, miembro del Departamento de EPC de nuestra filial solar fotovoltaica, Atersa) y Tomás Enfedaque, ya jubilado tras una extensa etapa de 15 años en nuestra filial constructora, EHISA, donde se especializó en infraestructuras y gestión del agua.
ASÍ SON LOS VOLUNTARIOS Y TUTORES 2015
María Carreira: ingeniera de operaciones y producción en Celeo. Ya conoce Chile por razones profesionales, aunque ha aprovechado varios de sus viajes a aquel país para hacer también un poco de turismo. Su cercanía con aquel país le hizo seguir con especial interés la edición 2014 y le motivó para intentarlo en 2015. De hecho, le gusta el voluntariado desde siempre y lo ha ejercido en causas deportivas y sociales. Su sentimiento ante el reto se puede resumir en dos expresiones: muchas ganas y mucha ilusión.
Rubén López: el más veterano de los 3, con 8 años de trayectoria en el Grupo. Empezó en la Delegación Madrid de la Dirección Centro, muy centrado en proyectos de alumbrado público. Luego, en la Dirección de Desarrollo de Negocios, empujó actividades de eficiencia energética para volver recientemente a la Delegación Madrid y al campo del alumbrado público como Jefe de Obra. Era la segunda vez que Rubén intentaba ser designado Voluntario. Cuando se enteró de que ahora sí lo había logrado, lo primero que sintió fue sorpresa y luego mucha ilusión. Del reto le atrae todo: su componente técnica, la oportunidad que le brinda de conocer Chile, experimentar el día a día de los beneficios tangibles de la ingeniería en entornos sociales necesitados de refuerzo a sus infraestructuras… Su sentimiento más potente es de expectación.
Ana Jurado: trabaja en la central termosolar Astexol-2, en Badajoz, en la que ha desarrollado su actividad en los últimos años hasta convertirse en Jefa de Turno. En 2014 ya estuvo a punto de intentar ser Voluntaria, pero se le pasó el plazo. Ahora sí que ha estado muy atenta, entre otras cosas porque siguió con interés las andanzas de los Voluntarios 2014 y se sintió atraída por el reto técnico, el espíritu de trabajo en equipo tan ilusionado y desinteresado y el entorno de Atacama. Sus sentimientos primordiales son de ilusión y felicidad.
Agustín Suárez: Ya vivió la edición 2014, de la que extrajo muchas enseñanzas útiles de cara al próximo septiembre. Cree que esta vez primará la componente formativa, ya que los aspectos puramente técnicos fueron solucionados en buena medida el pasado año. Pensando en su posible participación en una tercera edición, dice que, si pudiera, elegiría África como escenario.
Tomás Enfedaque: otro veterano en el Voluntariado de la Fundación Elecnor, y no solo por su situación de jubilado capaz de seguir aportando su experiencia más allá de las puras obligaciones profesionales, sino también por haber mentorizado a los primeros 3 Voluntarios. También él se apunta a África si pudiera decidir dónde desarrollar el Voluntariado 2016.