Premiado el proyecto Luces para Aprender por su apoyo a la educación rural
La semana pasada se celebró en Uruguay el IX Seminario Internacional de Investigación sobre Educación Rural. Se reunió a especialistas en la temática de diferentes países latinoamericanos.
Durante la apertura del encuentro, se realizó un reconocimiento a instituciones, proyectos y colectivos que aportan con su trabajo y ejemplo a la calidad educativa y de vida de las niñas y niños en el medio rural. En ese sentido, se entregaron distinciones al Proyecto “Luces para Aprender” y al “Proyecto de Salud Bucal Rural” promovido por la primera dama del país, María Auxiliadora Delgado.
Hay que recordar que el pasado mes de junio la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI), la Administración Nacional de Usinas y Trasmisiones Eléctricas (UTE) y la Fundación Elecnor, firmaron una Adenda al Convenio suscrito en el marco del Proyecto “Luces para Aprender”. Esta 2ª fase del proyecto habilitará la instalación de equipos de energías renovables en espacios didácticos de energías limpias, emprendimientos comunitarios y en casas de escolares alejadas del tendido eléctrico.
El Director de la UTE, Walter Sosa, recordó los inicios del programa y consideró que coincidió con uno de los ejes estratégicos de la UTE, que es llegar con energía eléctrica a todas las instituciones y a todos los hogares del país, “no importa cuál sea su condición socio económica o su ubicación geográfica, contribuyendo a propiciar mejores condiciones de igualdad”.
Por su parte, el Director de la Fundación Elecnor, Jorge Ballester, expresó que este es el proyecto más emotivo de la Fundación, y recordó que “tuvimos la suerte de recorrer durante quince días las escuelas rurales por todo el país, y allí fue cuando tuvimos claro que este proyecto lo teníamos que hacer”. Destacó que “la unión y el esfuerzo de todos ha logrado que este proyecto cobre importancia”. El directivo citó a Aristóteles, para quien las raíces de la educación eran amargas, pero sus frutos muy dulces. “Hay que tener la paciencia suficiente como para invertir en proyectos sociales, cuyos resultados no son inmediatos. Entre todos estamos plantando una pequeña semilla, para que dentro de unos años esos frutos sean dulces”, valoró.
Cercanía en la lejanía
La madrina del Programa de Salud Bucal y Primera Dama, María Auxiliadora Delgado, dedicó unas palabras a los presentes, destacando la labor emprendida por este programa desde sus inicios. “Tuvimos la suerte de que una cantidad enorme de odontólogos aceptaran todas las escuelas rurales a las que había que ir y fuera un éxito. Al principio a las odontólogas les decían maestras”, recordó emocionada.